martes, 27 de enero de 2015
Más humildad y menos Hollywood
Hipérboles te quiero regalar
En forma de ironía y sarcasmo fatal
Superhombres en gringolandia viven hoy
En el cine y en el gobierno se revuelcan en su oro.
Siete mil cuatrocientos millones le apuesto a ese actor estúpido
A ver si gana la carrera del destruir dignidad
Explotados todos ellos en su selva,
como títeres, son dignos de prestigio y santidad.
El sistema nos absorberá,
Al salir de la educación.
En todo caso siempre hemos sido un producto,
Que les paga el sueldo a los patrones
A ellos que le chupan a pinocho sus pezones
Y a piñi, le pagamos sus acciones,
Y a ballenet, le bajamos los calzones.
La lista se agranda y sigue y sigue,
Matricúlese luego, para que crezcan sus botines,
Y maletines llenos de verdes cannabis
No me extraña, que los paquitos arrastren el pasto quemado,
Y se deshagan de todo el negro ganado.
Y sin hierva, no tendrían como verse.
Estarán, pronto, en su película Hollywoodense.
Mi misión no sé
Mi pereza crece cada día más
Los destruiré, me desespero por hacer algo "antisocial"
... Hoy, como otras cien mil veces antes, una nueva catarsis,
Un nuevo comienzo, más rápido,
Mi acción, La cobardía, se está disipando,
Y es cada vez más veloz.
Estoy harta y furiosa, y no tengo nada que perder...
Me voy haciendo cada vez más vieja,
El tiempo me obliga a apurar ésto,
Mi plan siniestro.
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